Bolarque: una playa paradisíaca en el interior de Castilla

En el interior también existen playas  paradisíacas y la de Bolarque es un ejemplo de ello. Muy cerquita de Madrid, en el municipio de Almonacid de Zorita, se ha acotado una zona del embalse del mismo nombre y se ha habilitado una zona con arena. Se encuentra rodeada de pinos, merendero, chiringuito…. Una excursión para disfrutar todo el día en familia en plena naturaleza.

El llegar no es fácil. Se debe tomar la carretera de Almonacid a Albalete de Zorita y entrar por la urbanización «Nueva Sierra». Si se pone en google «embalse de bolarque», os guiará por la ruta más corta, atravesando el pueblo y llegando al puerto deportivo por una carretera bastante peligrosa de Montaña. Eso sí, las vistas del lago y sus hoces son impresionantes.

La zona de playa tiene todo lo que se puede pedir, pero os advertimos de que se cobran 10 euros de entrada. Los niños menores de 3 años entran gratis y no está permitida la entrada de mascotas. El coste es para el mantenimiento de las instalaciones, la limpieza de la zona y el socorrista. Tiene vestuarios y baños y una zona de merendero con mesas de piedra.

La zona de arena es amplia, desde donde se puede entrar fácilmente al agua o bien optar por descender desde unas escaleras habilitadas en una zona de cemento existente para aquellos a los que no les gusta la arena. El agua es verde y no suele tener corrientes, aunque es bueno siempre estar pendientes de los más pequeños.

Se pueden introducir colchonetas e inflables, pero merece la pena también estar tranquilos en el agua y observar cómo los peces nadan alrededor de nuestros pies. En la zona existen también muchos cangrejos y si andáis por la orilla, los podréis ver sin ningún problema. Les encanta la carne, por lo que un trocito de chorizo o cualquier fiambre en una roca cercana al agua será un festín para ellos y los podréis observar en su hábitat.

Otra posibilidad es hacer hidropedales o kayak. Se alquilan en el momento y hay individual, para dos o tres si el niño es pequeños y se puede situar en la zona intermedia de la barca. Esto os permitirá recorrer los rincones de la zona y acercarnos a la cercana cueva de la Tortuga. Hay otras actividades náuticas, como catamarán o recorridos en lancha, que se hacen desde el puerto deportivo del embalse, pero hay que contratar con anticipación.

La zona ofrece numerosas posibilidades y el entorno es precioso, pero también, por eso, hay bastante aglomeración los fines de semana, por lo que se debe llegar a primera hora. El aforo es de 800 personas y una vez completo se corta el acceso. El horario es de 9.00 a 20.00 horas. Nosotros fuimos entre diario y perfecto. Incluso pudimos ver ardillas entre los pinos. Un plan ideal en plena naturaleza para pasar en familia.