Trillo es el pueblo donde el río Cifuentes desemboca en el Tajo, dando una singularidad única a este municipio de Guadalajara. El desnivel entre ambos ríos se traduce en cinco cascadas que atraviesan el pueblo y una zona de recreo en los márgenes del río Tajo, muy cuidada. Una excursión muy agradable, a poco más de hora y media de Madrid.
Las cinco cascadas presentan un recorrido circular muy fácil de realizar, aunque no apto para personas con movilidad reducida. A los perretes también les costará atravesar alguna de las pasarelas de hierro existentes sobre el agua, aunque estas son muy pocas. Lo más fácil es dejar el coche en el parking ubicado al lado del Tajo y empezar desde la parte baja el recorrido por las cascadas.
El recorrido en torno a las cascadas
La más sorprendente es la conocida como Chorrerón, una cola de unos 15 metros y el último salto del río Cifuentes antes de llegar al Tajo. El resto son más pequeñas pero no por ello menos sorprendentes. Hay una zona donde se juntan tres y durante este paseo, también se puede contemplar las antiguas canalizaciones realizadas para trasportar el agua a los molinos cercanos al río.
Uno de ellos, se encuentra en el mismo río y en su exterior se puede contemplar alguna de las herramientas utilizadas antiguamente, entre ellas las ruedas del molino. El edificioS alberga actualmente el Centro de Interpretación de la Energía ‘Prometeion’. Está abierto todo el año, excepto los lunes. Se recomienda concertar la visita, con una duración entre 50 y 60 minutos (El teléfono de turismo de Trillo es 949 815 363).
El río a su paso por el molino
En Trillo también se puede disfrutar de un Museo Etnológico que permite conocer la cultura popular del municipio. Se ha reconstruido una alcoba y cocina antigua y también se dedica una parte a la producción agrícola y a la educación.
Y por supuesto, no se puede dejar de pasear en el entorno del Tajo. Una de sus márgenes posee columpios infantiles, una zona muy grata para esta con niños. La otra más natural, para hacer picnic o simplemente disfrutar del ruido del agua y observar a los pescadores. Desde eel puentee principal podréis contemplar también las chimeneas de la central nuclear, que la verdad impresionan.
Puente sobre el río Tajo
Ambos ríos discurres, actualmente, con muchísima agua y es muy grato sentarse a tomar algo en su márgenes.
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